La contaminación de las aguas superficiales y subterráneas por nitratos, procedentes de fuentes de origen agrario, es uno de los principales problemas sanitarios y ambientales a los que se enfrenta el sector agrario en la actualidad. El uso incorrecto de los fertilizantes utilizados en la agricultura y la gestión inadecuada de los estiércoles ganaderos, supone un exceso de nitrógeno en el medio que induce la eutrofización de las aguas superficiales y, en general, un aumento de la presencia del ion nitrato en las aguas superficiales y subterráneas que limita sus potenciales usos, a la vez que supone un riesgo para el medio ambiente y la salud humana.
 
El reto que supone la protección de la calidad de las masas de agua frente al incremento de la presencia de nitratos y la eutrofización se materializó en la adopción, por las instituciones europeas, de la Directiva 91/676/CEE, de 12 de diciembre de 1991, relativa a la protección de las aguas contra la contaminación producida por nitratos de origen agrícola. Esta norma tiene como fin proteger la salud humana y los ecosistemas acuáticos de los efectos negativos de la presencia de nitratos, así como la protección de los usos legítimos de las aguas.
 
El Real Decreto 47/2022, de 18 de enero, por el que se transpone al ordenamiento jurídico nacional la citada Directiva, plantea la mejora de la calidad de las aguas a través de la adopción de medidas que reduzcan los aportes de nitrógeno. La norma insta a que las Comunidades Autónomas designen como zonas vulnerables aquellas partes de sus territorios cuyas pérdidas de nitrógeno por lixiviación o escorrentía puedan contribuir a la contaminación de las aguas superficiales y subterráneas.
 
En el marco territorial de la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha se han designado 9 zonas como vulnerables por nitratos bajo el amparo normativo de la Orden de 21 de mayo de 2009, de la Consejería de Industria, Energía y Medio Ambiente, posteriormente modificada por la Orden de la Consejería de Industria, Energía y Medio Ambiente de 4 de febrero de 2010, la Orden de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente de 7 de febrero de 2011 y la Orden 158/2020, de 28 de septiembre, de la Consejería de Desarrollo Sostenible.
 
Consulta de las zonas designadas como vulnerables a la contaminación por nitratos de origen agrario en el Portal de Mapas de Castilla-La Mancha.
 
Una vez determinadas las zonas vulnerables, las Comunidades Autónomas deben elaborar y aplicar programas de actuación en dichas zonas que, en base a la información científica disponible, recogerán las medidas necesarias para la prevención y reducción de la contaminación causada por las actividades agropecuarias.
 
En su cumplimiento, la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha ha adoptado sucesivos programas de actuación, desde la primera declaración de zonas vulnerables realizada en 1998. El programa actualmente en vigor fue aprobado por la Orden de 4 de febrero de 2010, de la Consejería de Industria, Energía y Medio Ambiental, modificado por la Orden de 7 de febrero de 2011 de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente, la Orden de 2 de agosto de 2012 de la Consejería de Agricultura y la Orden 158/2020, de 28 de septiembre, de la Consejería de Desarrollo Sostenible.
 
Actualmente se está tramitando un nuevo programa de actuación aplicables a las zonas vulnerables a la contaminación por nitratos designadas en la Comunidad de Castilla-La Mancha, cuyo objeto es prevenir y, en su caso, corregir la contaminación causada por nitratos de origen agrario en Castilla-La Mancha, en las masas de aguas superficiales y subterráneas, así como la eutrofización de los lagos naturales de agua dulce y otras masas de agua dulce naturales, de modo que se garantice el cumplimiento de los objetivos de la Directiva 91/676/CEE y del Real Decreto 47/2022.
 
Información sobre la tramitación del programa de actuación aplicable a las zonas Vulnerables en el Portal de Transparencia de Castilla-La Mancha
 
Para completar el conjunto de instrumentos que implementa el marco normativo en esta materia, el Real Decreto 47/2022, de 18 de enero, sobre protección de las aguas contra la contaminación difusa producida por los nitratos procedentes de fuentes agrarias, prevé la elaboración por las Comunidades Autónomas de uno o varios códigos de buenas prácticas agrarias, que los agricultores podrán poner en práctica de forma voluntaria, con la finalidad de reducir la contaminación producida por los nitratos de origen agrario.

 
El código de buenas prácticas de Castilla-La Mancha actualmente vigente, con más de 20 años desde su aprobación, está inmerso en un procedimiento de revisión, en base al cual se está elaborando un nuevo texto que permita adecuar el contenido de este instrumento a la realidad del sector agropecuario castellanomanchego y la mejora en el estado de conocimiento sobre la incidencia del nitrógeno agrario en las masas de agua.
 
Caracterización de las fuentes de contaminación de aguas subterráneas y superficiales mediante técnicas multi-isotópicas en Castilla-La Mancha.
 
La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, consciente de la problemática actual, realizó en el año 2021 un estudio que permite identificar el origen de la contaminación por nitratos en las zonas vulnerables declaradas en Castilla-La Mancha.
 
La contaminación por nitratos de las aguas está relacionada, principalmente, con las pérdidas de redes de saneamiento, lixiviados de vertederos urbanos, el empleo de fertilizantes inorgánicos y orgánicos y con pérdidas o vertidos de residuos ganaderos. Los análisis clásicos de aguas únicamente han permitido determinar el grado de contaminación de las aguas por nitratos, pero no su potencial origen. Para identificar este origen además de realizar analíticas convencionales, se han realizado analíticas multi-isotópicas, que permiten diferenciar las distintas fuentes de contaminación antrópicas, así como entender y evaluar los procesos de fraccionamiento que afectan a los contaminantes, tales como la atenuación natural del nitrato en el caso de que exista.
 
La determinación del origen del nitrato en las aguas continentales de la Región en las diferentes zonas vulnerables declaradas en la actualidad permitirá actuar preventivamente contra nuevas contaminaciones, así como establecer las medidas necesarias de manera más precisa hacia la fuente que la origina, logrando reducir los niveles de contaminación por nitratos en los que se encuentra actualmente esta comunidad, para cumplir con los objetivos establecidos en el Real Decreto 47/2022, de 18 de enero, sobre protección de las aguas contra la contaminación difusa producida por los nitratos procedentes de fuentes agrarias.