AYUDAS PARA LA INSTALACIÓN DE DETECTORES DE PRESENCIA
Actualmente, uno de los objetivos esenciales existentes dentro del ámbito de la Unión Europea y por consiguiente de los Estados miembros que componen la misma, es la reducción del consumo de energía y la prevención del gasto energético. Con medidas en eficiencia energética, se contribuye y se lleva a cabo el citado objetivo, de tal manera que reduciendo el consumo de fuentes de energía fósiles y reduciendo las emisiones de gases contaminantes, se consigan los compromisos suscritos en el ámbito del Protocolo de Kioto, sobre el cambio climático, con los compromisos y objetivos de la denominada iniciativa 20-20-20, aumentando con ello la calidad de vida y salud de los ciudadanos.
El consumo de energía en los edificios residenciales y comerciales representa aproximadamente el 40% del consumo total de energía final y el 36% de las emisiones totales de CO2 de la Unión Europea, por ello se hace necesario mantener acciones encaminadas a fomentar el uso de aparatos y elementos que sean eficientes energéticamente, de tal manera que se contribuya al cumplimiento de la reducción del consumo energético.
A este respecto por tanto, se pretende mantener y dar continuidad a las líneas de ayudas en ahorro y eficiencia energética que desde el ámbito de nuestra Comunidad Autónoma se han ido convocando, como base fundamental para la incentivación del ahorro energético y concienciación social sobre la necesidad de la reducción de la emisión de gases contaminantes y utilización eficiente de la energía.
Las líneas de ayudas que se convocan, se encuadran en cuatro programas, destinados a la sustitución de ventanas (programa 1); sustitución de generadores térmicos individuales -calderas individuales – (programa 2); sustitución de generadores térmicos de alta potencia - calderas de alta potencia o salas de calderas – (programa 3); y sustitución de pulsadores convencionales de iluminación por detectores de presencia (programa 4); los cuales tienen por objeto la sustitución de los elementos utilizados respectivamente en cada uno de ellos por otros sistemas o mecanismos con mayores rendimientos desde el punto de vista energético. Los destinatarios de las mismas son tanto los particulares como las comunidades de propietarios, dada la elevada importancia que adquiere la promoción de medidas tendentes a la mejora de la eficiencia energética de las instalaciones de ámbito doméstico, y dada la repercusión que estas tienen en el consumo energético global